¡Ashantis!

Hace como un año, al finalizar una ceremonia Scout, una de mis pioneras se me acercó y me dijo: “Hermano, usted cambio mi vida”. Ese momento tuve la certeza de que el voluntariado que había estado realizando, en el cual puse alma, vida y corazón, por el cual dejé de lado mis hobbies, cancelé muchas reuniones con mis amigos e, incluso, postergué tareas en mi trabajo…  ¡había dado sus frutos!

En estos tres años y medio que soy dirigente Scout no todo fueron sacrificios, la verdad es que me divertí mucho… debo aceptarlo, ¡la pasé genial! El preparar cada reunión de sábado se convirtió en un desafío, un gran desafío si es que el objetivo era lograr que los Scouts de la Unidad Ashantis del Grupo Scout “Murray Dickson” lleguen puntuales, uniformados y con las ganas suficientes para pasar unas horas fuera de lo común.

En estos tres años y medio hemos reído, jugado, pensado, divertido, aprendido y accidentado (ja, ja, ja) de toda manera imaginable.

Cada sábado hemos estrenado un juego, dinámica o actividad diferente. En esa búsqueda constante de “nunca tener dos reuniones iguales”  hemos encontrado algunas actividades que se quedarán mucho tiempo en el Movimiento Scout del país… como “Kabaddi Scout”, ¡el mejor juego pionero del mundo mundial!

Cada sábado se ha hablado de algo especial, solo 5 minutos, ¡quédense quietos por favor! (Alguien corre hasta la puerta del colegio, ja ja ja). En esos 5 minutos hemos tocado temas como la importancia de saludar fuerte y claro, el respeto por los mayores, las notas escolares, el ser útil, el no ser flojo, el suicidio, el carácter y la búsqueda de nuestro propósito en la vida.

Cada sábado hemos visto cómo cada pionero que ha llegado (porque han llegado muchos) se ha ido transformando hasta convertirse en una persona adulta, lista para elegir su camino y con la certeza de que lo que haga, ¡lo hará bien!

Hace dos semanas, dos días antes de nuestra reunión Scout, sentí que debía cambiar el programa de ese sábado. Ese rato no podía explicar el motivo, en ese momento no había motivo, pero sabía que debía cambiarlo y lo hice… ese sábado tuvimos una reunión diferente donde, al finalizar, cada uno de nosotros explicó porque era importante ser Scout, porque era importante nuestra unidad Ashantis y todo lo que habíamos logrado en este tiempo… y así, sin saberlo pero sintiéndolo, esa fue mi última reunión como dirigente de unidad.

Esta fue la tercera vez que soy Dirigente de Unidad en toda mi vida… pero algo me dice que no será la última 🙂

¡Ashantis! A seguir adelante, con la cabeza en alto, con el orgullo de haber formado parte de esta gran unidad y el saber que ustedes están construyendo un mundo mejor.

¡Ashantis! No dejen de esforzarse cada día por ser mañana una mejor persona… no dejen de sonreír a la vida y de estar «siempre listos» para que los demás también puedan sonreír…  no dejen de creer que ustedes tienen un propósito en la vida, que su existencia no es casualidad y que pueden llegar tan lejos como su imaginación lo permita… no dejen que sus problemas los agobien, recuerden que ustedes están acá para solucionar problemas, los suyos y los de los demás… simplemente, sean buenos… más buenos que ayer.

¡Ashantis! Hoy quiero decirles: “Ustedes cambiaron mi vida” 🙂

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